Abel Prades | Castellón
Día: Sábado, 27 de Diciembre.
Ruta: Salida celebrada por el grupo con motivo de las fiestas navideñas. De Castellón nos dirigimos hacia Moró por la Senda de “Els Perxets”(Cazadores). Continuamos hacia San Miguel evitando la carretera. Subimos a la ermita y después seguimos dirección a La Piedra de Borriol, desviándonos antes de llegar para bajar por la Fuente de Codina. Cogemos carril bici hacia La Pobla por problemas de tiempo. De La Pobla regresamos a Castellón por l’Assut de Borriol.
Participamos: Ádamo, Dani, David Sanchís, Carlos, José Luis, Miguel Sales, Jose Del Amo, Faustino, Toni Calduch, Pepe, Juanjo, Álvaro, Rodrigo, Antonio, David Murillo, Juan, Xavi Fresquet, Esther, Bastien y yo.
Excelente la respuesta de los carajilleros a la convocatoria del “Almuerzo Navideño”.
Tras los saludos correspondientes a la llegada a los puntos de encuentro comenzamos la ruta hacia La Pobla. Como originalmente estaba programado ir a Moró, pasamos por Moró y aprovechamos para subir Sant Miquel, que generalmente depués del almuerzo no suele apetecer.
Hemos tenido suerte y en el apartado de incidentes no hay muchos que destacar. Bastien ha doblado la patilla del cambio y hemos parado a enderezarla. Y, hablando de doblar, el tio nos “ha doblado a todos”, subiendo y bajando. ¡Esther lo tienes hecho un mulo!
A partir del Pou del Mollet, nos hemos separado, los más trialeros se han ido a bajar por la senda de La Font de Sant Martí y el resto hemos bajado por Codina que, generalmente, tampoco tenemos oportunidad de bajar. Al llegar al asfalto nos volvemos a reagrupar.
El tiempo se nos ha echado encima y decidimos coger el camino de la antigua Via Augusta hasta La Pobla.
Allí se unen al grupo David Murillo, dichosos los ojos, que ha llegado con bici, y Pepe y Xavi, que está de vacaciones por Navidad.
En el almuerzo se respira cordialidad y alegría, que por otra parte forman parte de la idiosincrasia del grupo. Celebramos la oportunidad como se merece, risas, bromas, cachondeo y… palmero.
En el regreso, los que tienen más prisa se bajan por el carril bici, el resto lo hacemos por el azud.
Al finalizar la salida, los que quedábamos, nos hemos unido en corro para lanzar el grito de guerra pero como carecemos del mismo nos hemos conformado con un: Uh, uh, uh, uh…
Nada más felicitar desde aquí a todo el mundo, y en especial a los Carajilleros, el Año Nuevo .
Y ya sabeís, para este próximo Año Nuevo, ¡Salud, pedal y Carajillos a raudal!