Abel Prades | Castellón
Hace más de dos años que deje de escribir para el blog. Estas pasadas Navidades, sentí curiosidad por conocer la fecha del primer post y me entró cierta nostalgia del pasado, proponiendome escribir, al menos, este post.
También recordé que quedaba por organizar un poco el histórico de rutas, sobretodo la parte correspondiente a la primera época. Así que, durante las vacaciones navideñas, revise los posts y los incluí junto con el resto en la página de Histórico de Rutas.
Ahora, pasadas las navidades, una vez reiniciadas las salidas con bici, me toca cumplir con el próposito de escribir està crónica.
No quiero olvidarme de decir que durante estos más de dos años de silencio, las rutas carajilleras han seguido su transcurso normal. Hemos seguido saliendo todos los sábados como era y es preceptivo. El grupo ha ido evolucionando, con algunos que otros cambios. Han llegado nuevos carajilleros, otros ya no salen, tenemos algunos bebés carajilleros, por cierto, aprovecho para felicitar públicamente a los papás y mamás carajilleros, y nunca perderemos la esperanza de que regresen algunas de las viejas glorias.
Después de este pequeño preámbulo de reencuentro paso a la tarea que nos ocupa.
El sábado pasado, 13 de enero, salimos desde Castellón: José Luis, Álvaro, Miguel, Emilio, Paco (el vecino de Miguel), Juanito y yo. Toni apareció con la bici de ciclocross para despedirnos. Después me dijeron que no se encontraba muy bien y se volvió para casa.
Tomamos el carril bici dirección a Moró y hicimos las sendas de Masía Gaetà y la Cuesta de Los Pinos, continuamos la subida hasta la Masía Conhort y aquí seguimos por el parany y la trialera del Barranco del Manyo, más conocida por el nombre anterior.
Antes de llegar al barranco nos desviamos para subir por la senda de la Montaña de Clara. Les comenté que hace unos años se podía bajar al Tomillar por una senda que transcurría por encima de una losa. ¿Qué dije? Vamos a buscarla! Y allá que nos fuimos y la encontramos.
Desde El Tomillar cogimos el camino real para acercarnos a Monte Cristina y cruzar, por la senda, hasta la carretera del polígono de Moró.
Es un poco pronto para almorzar y decidimos dar un paseo por la Rambla, llegando hasta el Mas de Flors y siguiendo por Les Serretes hasta la Font Juncosa. De aquí, carretera y manta.
Llegamos a Moró y Los Arcos está lleno. Decidimos probar suerte en el nuevo bar El Cantonet. Es del mismo dueño que el Mesón Prades pero con otro estilo. Almorzamos aceptablemente y a buen precio. Paco se saltó el waypoint del almuerzo y continuó rodando hasta Almazora.
Después del almuerzo, tocaba probar la senda, limpiada recientemente, que va desde las torres de la luz hasta els Perxets (Cazadores). Bonita y asequible.
José Luis me tenía guardada una. En el almuerzo habíamos comentado que ya no hacíamos la Trialera del Pintor y me la reservó de postre. La primera rampa fué motivo de análisis. Al final se tiraron todos menos Álvaro y yo. El resto de trialera lo superamos todos con la dirección de José Luis en la última rampa.
Ya nos quedaba poco, tan solo las sendas de Masía Gaetà que hicimos con la variante del barranco. Yo me acordé que no había hecho ninguna foto y me salí por la tangente, adelantándolos por la senda de la gasolinera y los espere para pillarlos “in fraganti”.

El señor nos guia

Los fieles guiados

La felicidad está con nosotros

El grupo sin el autor

Con el autor

Con la lengua fuera
Salud y pedal…. y carajillos a raudal. ¡Hasta la próxima!