Abel Prades | Castellón
Día: Sábado, 28 de Abril.
Ruta: Salida desde Castellón, dirección a La Pobla por el azud. Aquí se produce la primera alternativa, unos vamos por el camino de arriba y otros por el de abajo. Una vez pasado el “rampón” de La Pobla y cerca ya de la autovia nos desviamos por la derecha para subir un pequeño tramo y hacer a continuación un trozo de la nueva senda que va desde el Coll de la Mola a La Pobla. Una vez en La Pobla tomamos dirección a la Urbanización Montepobla y seguimos hasta la zona del Puntal, desde donde descendemos por una trialera-senda a buscar la Vía Augusta, que tomamos de regreso hacia La Pobla. Después continuamos por la misma y carril bici hasta Castellón.
Somos de la partida: Antonio, Roberto, Sofía, Migue, Fernando, David Sanchís, Juanjo, Toni, Salva, José Luis, Pepe, Rodrigo, Santi, Julián y yo.
El objetivo de la salida es hacer dos sendas nuevas: La nueva senda que va desde La Pobla al Coll de la Mola y una de las sendas nunca hechas. Así se conocen, las sendas que hace Carlos, cuando nos quedamos a almorzar en La Font Seca y él continúa dándose una vuelta por los alrededores.
La primera senda parte del mismo lugar que la de las abejas, desviándose enseguida del trazado anterior, por la derecha, y conduciendonos a través de una senda fácil y divertida hasta el camino paralelo a la autovía. Muy asequible y recomendable.
La segunda senda, “la nunca hecha”, parte desde El Puntal a buscar la Via Augusta. Tiene gran cantidad de piedra, como la Trencadits, pero a diferencia de ésta no presenta pasos comprometidos, por lo que es bastante ciclable.
Por lo que respecta a la salida, decir que Santi nos obsequió con su presencia, pero esta fué breve, ya que en la variante del azud, desapareció. También se separaron pronto Jose Luis y Salva, que tenían compromisos ineludible con sus respectivas y eso es sagrado.
Paramos a almorzar en la sede del club, La Font Seca, y allí encontramos a los “Fanfa” que estaban ya a punto de carajillo. Parece ser que David M, también estuvo almorzando, junto con Carlos que le acompañó.
Tras el almuerzo, y dada la hora que era, bajada rapidita por el carril bici. Cada uno a su redil. El grupo en el que yo partí, salimos un poco más tarde, ya que nos quedamos a ayudar a Pepe a reparar, que no se habia percatado, con anterioridad, de un pinchazo.
Hasta la próxima. Salud y pedal.